Tenemos unos pases anuales para el zoológico. Y tenemos unos niños que no los sueltan ni a sol ni a sombra... especialmente cuando vamos al zoo y pueden perder la tarjeta por la calle. Así que había que buscar un acuerdo razonable: estas carteritas para que las lleven colgadas del cuello.
Están hechas con unos restos de telas de colores, planchados con cinta de "bajo-sin-costuras" (porque las dobleces son tan estrechas que no hay manera de sujetarlas con alfileres), y adaptando las indicaciones de estos monederos de Thimbleanna.
Para más detalles...
En el interior llevan un separador, para poder meter su tarjeta en la ventanita y además alguna otra cosa en el bolsillo de detrás.
La verdad es que es muy fácil y muy rápido de hacer excepto un paso: volver del derecho. Yo escogí un plástico transparente un poco rígido y no se doblaba bién para volver la bolsita del derecho. Y, cuando lo conseguí, se me quedó un poco arrugado. Igual es mejor idea coserlo del derecho a mano con punto invisible.
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ooooooo, como me gustan :)
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